La maestra poseída

-Petición 11-

Luis caminaba con dificultad, no pensaba que poseer  su maestra al mismo tiempo que saliera de su casa para ir a la escuela no fuera buena idea, la mujer por lo regular se veía algo provocativa, pues era joven le gustaba mostrarse linda siempre mas no vulgar, Luis era de esos chicos que les atraía su maestra, quizás por lo joven, quizás porque es una mujer, quizás porque tenía un cuerpazo, sin embargo era de esos locos en el mundo del tg obsesivos por buscar la manera de robar el cuerpo de una chica, la maestra Ángela de 28 era la mejor opción, una maestra de matemáticas tan joven y devota a su profesión, estaba soltera en esos momentos pero jamás le haría caso a un chico de 10 años menos inclusive si este era su alumno, tomó las cosas de la profesora y camino hasta el camión donde fue íntimamente acosada, ahora entendía un poco el complejo femenino, la chica no opuso resistencia pues fue una posesión rápida, elimino el alma del cuerpo de está enviándolo al más haya, mientras que el mismo dividió su alma para que otra parte de él se quedara con su cuerpo,  no  quería ser el de quedarse sin las ganas de demostrarles a sus compañeros que había conseguido a la chica más buena de toda la escuela aunque esta fuera la maestra, aun así le excitaba como se sentía dentro de ese cuerpo femenino, sus caderas se movían al compás de los tacones, sus tetas le provocaban sumergirse hasta la excitación más placentera cuando caminaba y estas rebotaban dentro de su blusa escotada, la mujer llego a dar sus clases, se notaba excitada, por fortuna era el chico más inteligente del salón también, así mismo tenida los recuerdos y habilidades de la maestra, nada que pudiera complicar su robo espectacular de cuerpo, en cambio el otro Luis aun sin saber los resultados de su experimento esperaba a hablar con su profesora preferida al terminar las clases, el timbre sonó y la adorable maestra dijo en voz alta para que todo el salón escuchara, -Joven Luis lo espero en la salida tenemos cosas de que hablar, en ese momento Luis sintió el verdadero terror, pues comenzó a imaginar muchas cosas sobre lo que diría, quizás el experimento fallo y la Profa. lo sabe todo y lo regañara o le dirá que sí, si es que funciono, el otro Luis le diría que funciono y estarían juntos con el sexy cuerpo de la maestra por siempre.